Durante este año hemos vivido momentos muy especiales en La Casita de Karla, instantes que se han quedado grabados en nuestra retina pero, sobre todo, que han sido captados por nuestros objetivos para perdurar por siempre.
Empezamos el año con una dedicación especial a la fotografía de recién nacidos, unas sesiones que requieren de paciencia pero cuyos resultados son maravillosos. Durante un tiempo nos hemos formado para este tipo de fotografías pues para obtener buenos resultados es necesaria la experiencia, el conocimiento de determinadas técnicas y trucos que ayudan al fotógrafo a sacar lo mejor de cada bebé. Además, es durante los primeros diez días de vida de los recién nacidos cuando se dan las mejores condiciones para este tipo de fotos, que se acaban convirtiendo en el recuerdo más tierno de nuestros pequeños.
Después del verano apostamos por incidir en la fotografía de embarazadas. Para nosotros es muy emocionante conocer a los bebés cuando aún están en la barriga de mamá. Supone el inicio de un ciclo y de una relación cercana entre nosotros como fotógrafos y las parejas que vienen hasta nuestro estudio para captar ese momento de felicidad. Hemos tenido la gran suerte de poder conocer a muchos de esos bebés después de nacer, fotografiar sus primeros días, verlos crecer, compartir sus primeros pasos y sus primeras palabras… y nos hemos sentido parte de sus vidas.
